Puedo oir el sonido de la lluvia
que, como los recuerdos, cae
suave y cálida sin parar,
golpeando en el techo y en las paredes.
Y desde el refugio de mi mente,
através de las ventanas de mis ojos
puedo ver, más allá de las calles mojadas,
Inglaterra donde se encuentra mi corazón.
Mi mente se encuentra aturdida y confusa,
mis pensamientos vuelan a muchos kilómetros de distancia,
yacen junto a ti mientras duermes
y te besan cuando comienzas un nuevo día.
Y una canción que estaba escribiendo la he dejado sin acabar.
No sé por qué pierdo el tiempo
intentando escribir canciones en las que no puedo creer,
con palabras que destrozo y fuerzo para que rimen.
Como puedes ver he llegado a dudar
de lo lo que una vez consideré verdadero.
Me encuentro solo y sin creencias.
La única verdad que conozco eres tú.
Y mientras contemplo cómo las gotas de la lluvia
tejen sus aburridos regueros y mueren,
me doy cuenta de que soy como la lluvia:
si no fuera por tu bondad mi destino sería igual